Lasvocesdelpueblo y Agencias – La ministra de Fomento en funciones, la diputada del PP Ana Pastor, ha sido elegida hoy nueva presidenta del Congreso de los Diputados de la XII legislatura. Madrid (España), martes 19 de junio de 2016. Fotografía: La hasta ahora ministra de Fomento en funciones, Ana Pastor, nueva presidenta del Congreso de los Diputados. Efe
La XII Legislatura se ha inaugurado este martes con la constitución de la Cortes Generales surgidas de los elecciones del 26 de junio. La ‘popular’ Ana Pastor ha sido elegida presidenta del Congreso, en segunda vuelta y por mayoría simple, haciendo bueno el acuerdo entre PP y Ciudadanos que se alcanzó el lunes por la tarde y por el que ambos partidos se aseguraban la mayoría absoluta en la Mesa del Congreso.
Y es que tras este acuerdo entre azules y naranjas y la falta de acuerdo entre los partidos de izquierdas y nacionalistas para promover una alternativa viable, la elección de la hasta ahora ministra de Fomento en funciones fue inevitable, por 169 votos a favor (los mismos que en la primera ronda) frente a los 155 que sumó el socialista Patxi López al unirse el voto del PSOE y Unidos Podemos en la segunda votación y 25 votos en blanco (los de ERC, CDC, PNV, EH Bildu y Coalición Canaria).
El PSOE, que aspiraba a un pacto con Ciudadanos y Podemos para la reelección de Patxi López como presidente del Congreso, hubo de asumir que no había alternativa a Pastor dado el acuerdo «razonable» y «legítimo» de PP y Ciudadanos -en palabras del portavoz parlamentario socialista, Antonio Hernando- que, por otra parte, responde a lo que los socialistas han demandado al presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, «que hable con los que están más próximos» ideológicamente.
También, el secretario general del Podemos, Pablo Iglesias, que intentó promover la candidatura del líder de En Comú Podem, Xavier Domènech, y que buscó un pacto de «reciprocidad» con el PSOE para apoyar mutuamente a sus candidatos después de la primera vuelta, decidió que votarían a Patxi López en la segunda vuelta para presidir el Congreso, visibilizando así que fueron los socialistas los que no quisieron sumarse a ese compromiso recíproco de impulsar una Presidencia de izquierdas.
Al ser proclamada Ana Pastor, desde la tribuna de invitados del hemiciclo una persona se ha puesto en pie y ha gritado citando a las víctimas del tren Alvia siniestrado en Santiago de Compostela en 2014, siendo Pastor ministra de Fomento. La Plataforma Víctimas Alvia 04155 ha considerado «una auténtica burla» que quien consideran una responsable política del accidente sea nombrada la tercera autoridad del Estado.
Además de a los presidentes del Congreso y del Senado, se elige a cuatro vicepresidentes en la Cámara Baja y a dos en la Alta. En ambas instituciones resultan elegidos los que obtengan mayor número de votos. De la misma forma se designa a los secretarios, que son cuatro tanto en el Congreso como en el Senado.
Para la Vicepresidencia Primera del Congreso, el PP y Ciudadanos apoyarán la candidatura de Ignacio Prendes, que ya representaba al partido naranja en este órgano en anterior legislatura. El resto de vicepresidencias las ocuparán Micaela Navarro (PSOE), Gloria Elizo (Unidos Podemos) y Rosa Romero (en enero se eligió también a Celia Villalobos, pero esta queda ahora fuera de la Mesa tras 13 años y pasará a integrarse en el grupo parlamentario popular como portavoz adjunta).
Para las Secretarías se presentan Alicia Sánchez Camacho (PP), Juan Luis Gordo (PSOE), que se estrenará en la Mesa; Patricia Reyes (diputada de Ciudadanos que ya fue secretaria en la anterior legislatura y que contará con apoyo del PP) y Marcelo Expósito (En Comú Podem), además de un representante del PP.
Concluidas las votaciones de todos los miembros de las Mesas del Congreso y del Senado, los elegidos ocuparán sus puestos y el presidente electo presentará y solicitará de los demás diputados y senadores el juramento o promesa de acatar la Constitución.
En la XI Legislatura, los diputados de Podemos y sus confluencias de En Comú, En Marea y Compromís aprovecharon la toma de posesión de sus cargos para pedir la reforma de la Constitución, para reivindicar la «diversidad» y la «soberanía» de «los pueblos del Estado» y para asumir un compromiso concreto para esta legislatura: trabajar por el empleo, por el medio ambiente, por la justicia social, para terminar con los desahucios o para recuperar la dignidad y dar la voz a la gente humilde, entre otras.
Emplearon indistintamente el castellano, el vasco, el catalán o el gallego en sus alocuciones e incluso el líder de la formación morada, Pablo Iglesias, utilizó la lengua de signos en parte de su intervención. Ahora no han querido precisar qué fórmula usarán, pero Iglesias ha dejado entrever en declaraciones a RNE que será similar. También han anunciado que harán el acatamiento de la Constitución «por imperativo legal» los diputados de PNV, Izquierda Unida, EH Bildu y ERC, formación que en enero también incluyó otras fórmulas que aludían a la «República catalana» o a la «Constitució catalana» en una «Catalunya lliure».
Entre las ‘novedades’, el nuevo diputado de Unidos Podemos Diego Cañamero ha anunciado que en su juramento hará mención al exedil de Jaén en Común Andrés Bódalo, encarcelado tres años y medio por agredir a un edil del PSOE del pueblo jienense de Jódar en una protesta jornalera en 2012.
Tras la ronda de juramentos o promesas, los presidentes del Congreso y el Senado, que podrán pronunciar un discurso si así lo desean, declararán constituidas las Cámaras, y se lo comunicarán al rey, a la otra Cámara y al Gobierno. Las Mesas de cada Cámara se reunirán una vez levantada esta primera sesión para comenzar a formalizar la creación de los grupos parlamentarios, que deberán estar creados en los cinco días siguientes. Los parlamentarios que no se adscriban a ningún grupo pasarán a formar parte del Mixto.
Constituidas las Cámaras, el presidente del Congreso informará al rey y a partir de ahí, el Jefe del Estado abrirá una ronda de consultas con los partidos con representación parlamentaria para poder proponer el candidato a la Presidencia del Gobierno, que habrá de comunicar al presidente del Congreso, para que este convoque el Pleno de investidura.
