Barcelona (España), jueves 12 de octubre de 2023 (Lasvocesdelpueblo).- Verónica Hernel, una mujer española, ha dado este mediodía su desgarrador testimonio del régimen totalitario que pisoteó los derechos fundamentales de los ciudadanos durante la enfermedad por coronavirus (COVID 19), causada por el virus SARS-CoV-2, y declarada «pandemia» por la Organización Mundial de la Salud (OMS) del 2019 al 2023 y que provocó «más de 600.000.000 de casos» en todo el mundo y «más de 6.800.000 de muertos», incluyendo los «falsos positivos en COVID 19» y las muertes por la gripe, todo contabilizados como caso o muerte por COVID 19.
VÍDEO. BARCELONA (ESPAÑA), 12 DE OCTUBRE DE 2023.
La víctima ha hecho estas manifestaciones en Plaza Cataluña de la ciudad de Barcelona, donde miles de personas han concluido una manifestación que inició unos 45 minutos antes en el Paseo de Gracia de la ciudad condal, esquina con calle Provenza, con el motivo del Día de España, 12 Octubre, y del Día de la Hispanidad y el de la patrona de España y de la Hispanidad, la Virgen del Pilar, bajo lema «¡Basta Ya de Concesiones!» al separatismo y a los filoetarras.
TOTALES DE LA VÍCTIMA DE UNA DICTADURA SANITARIA DURANTE LA «PANDEMIA» DEL CORNAVIRUS (COVID 19)
«Pues, mira. yo he tenido varios problemas con esto debido a que la gente […] como mucha gente se ha tragado la «farsa» [pandemia COVID 19], me intentaba, por ejemplo, cuando yo estaba en el Metro, obligar a que me pusiera también la mascarilla. Y yo me negaba.
Han habido ocasiones que al negarme […], por ejemplo en una ocasión, unas mujeres que iban juntas, una de ellas me dio con la típica ‘bolsa de compras’ así de papel que casi medio […] ¿Sabes? Ella me dio por aquí [cerca de mi ceja derecha] y casi me entra en el ojo.
También un señor, un día así, bueno bastante tiempo antes [del ataque de esa señora] —porque yo le grababa como me estaba increpando— ese señor me cogió el móvil pasó los tornos del Metro de Madrid y tuvo que intervenir uno [del servicio] de seguridad del Metro.
También en otra ocasión, pues me han llegado a detener también delante de la Estación de Atocha [Madrid] policías que me vieron sin la mascarilla puesta; un día que yo, justamente, venía a recoger a un familiar [y] estaba a punto de entrar. Entonces me tiré 10 o 15 minutos, diciendo que «¡no; que no me lo voy a poner!», que no sé qué. Saqué mi Documento Nacional de Identidad (DNI) porque los policías me lo habían pedido y yo lo estaba sosteniendo con mis manos para que lo vieran. O sea, de forma que lo vieran.
Y en un momento, uno de ellos (los Policías) me lo arranca, como con rabia, de la mano. Entonces, claro, no me lo quería devolver [mi DNI]. Yo les exigía varias veces que se identificaran —tengo los vídeos [del incidente]—. No quisieron identificarse hasta que en un momento, claro, yo me yo me alteré mucho y les gritaba que «¡ya basta!», «¡ya basta!», «¡Ya basta!» —cosa que se puede ver en el vídeo—. Y en ese momento, aprovecharon que me puse así y me redujeron.
Y…, bueno, tengo también fotos [del incidente] de que me dejaron con las marcas de los grilletes y todo. Y, bueno, que me pone los grilletes; ya me ponen el «trapo este inmundo» (mascarilla), también, en mi cara. [Y luego] me pasan así por una puerta que conecta directamente… pues, a la Comisaría de allí —donde está la las plantas estas que están por la Estación de Atocha—, pasamos debajo del típico cordón este [«Línea de Policía. NO PASAR» de color] blanco y rojo, de plástico. Y ahí entramos a Comisaría. Me ponen tinta en todas las huellas dactilares; me toman las impresiones; me sacan foto de frente, de perfil y el otro perfil, como si yo fuera una delincuente.
Vale. A ver, porque la mascarilla, si la llevas puesta por demasiado tiempo, no te deja respirar oxígeno correctamente. Además de que si la tienes puesta por el tiempo que sea, puede ser dos, tres horas o las horas que sea, aquí [en la cara] se te acumula un montón de virus y de bacterias que las está respirando.
Incluso, yo he llegado a ver gente que que la lleva puesta, que hasta ahora [desde que se decretó el fin del uso obligatorio de la mascarilla en España] hay gente que la lleva puesta, y estornuda con esa «cosa puesta» (mascarilla). Entonces, claro, a mí, personalmente, me da asco porque me imagino que esa persona si estornuda con eso [la mascarilla puesta], tendrá los mocos todos por aquí esparcidos. ¿Espero que no sea así porque si no? [La mascarilla] es que antihigiénico. ¡Vamos!».
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