Barcelona (Reino de España), sábado 9 de marzo de 2024 (Luis Torres Píñar).- España apesta a mierda y no es por la temporada de abonar la tierra española cada vez más esquilmada por las impresentables políticas llevadas a cabo durante, al menos, tres décadas. El hedor a mierda deviene de los políticos corruptos, empezando por el PSOE, PNV y ERC (partidos de pasado criminal), de SUMAR (coalición electoral adscrito al pasado asesino de Stalin), ese otro enredo de fascistas integrados en las siglas de Junts per Catalunya (JxCat), claramente terrorista, más algún otro incluido en el grupo Mixto del Congreso de los Diputados. No incluyo al Partido Popular porque creo que se sitúa en el espectro «binario», o sea ni sí ni no. Por lo que únicamente creo que nos queda VOX, como partido de representación.
Dicen los servidores de Carles Puigdemont Casamajó, que «la amnistía se concede por el bien de la convivencia y el encaje de Cataluña». Estos sátrapas corruptos que dicen hablar y representar a la mayoría de los españoles son el excremento fétido de la España cubierta de heces. Por otra parte, los fascistas secesionistas felizmente amnistiados, se vanaglorian que ahora estarán reconocidos para proclamar la independencia sin castigo y con pleno derecho. Será por aquello de la «convivencia en paz».
España apesta a mierda |La esencia de la dictadura republicana que se está tejiendo a la vista y con la cobarde sumisión de quienes legítimamente pueden hacer algo desde su posición política, parece ya un hecho sin vuelta atrás. El documento firmado por los fascistas de Junts PSOE ERC, Enmiendas Transaccionales —que contará sin duda con el apoyo de las «sanchinas» de siempre— es por lo menos de difícil aplicación. En su contenido se amnistían posibilidades que son de muy complicada aplicación en los términos que esperan los firmantes. La cuestión es: ¿Quién engaña a quién? De momento, la facultad de interpretar y aplicar esa infame Ley es de los jueces.
La puntualización que en diferentes medios de comunicación se hace referente a que se omite en todo momento el Código Penal del Reino de España, no tiene mayor importancia, ya que cada Estado es soberano con sus leyes siempre que estén homologadas dentro de los protocolos fijados en la Unión Europea (UE). El intento de amedrentar a los jueces advirtiéndoles que serán acusados de prevaricación en el caso de no aplicar lo que los fascistas han acordado, todavía hoy en España, no tiene efecto. Tan sólo forma parte de la chulería fascista. Otra cosa será en un futuro no muy lejano, cuando España sea la Venezuela de Europa.
España apesta a mierda |Todavía existen soluciones que brinden algo de esperanza. La más diáfana y con menor menoscabo para el prestigio como Nación, sería una implosión desde el propio PSOE, que diera por terminado el mandato del sátrapa pedro Sánchez Pérez-Castejón, expulsándolo del partido por traición. Otra opción, una vez más y no me rindo, apelo al dictamen del árbitro y moderador de la Constitución Española, su majestad Felipe VI de España, quien, debiendo cumplir con su obligación sin complejos, decline firmar lo que es sin lugar a dudas, una ley contraria a la Constitución Española y, por tanto, claramente vulnerando los derechos de todos los españoles. O por lo menos, antes de firmar, solicitar previamente la opinión y veredicto de los diferentes órganos de control que la propia Constitución Española prevé y que estos inmundos dictadores bolivarianos se han saltado sólo para favorecer la conveniencia de un cobarde huido, de un sátrapa presidente de un Gobierno caótico, y sin olvidar a esa familia de chorizos que gobernó en Cataluña durante muchos, muchos años, los Pujol (Jordi Pujol Soley y Marta Ferrusola LLadós).
No es ningún dislate que su majestad el rey Felipe VI de España exija que la Ley de amnistía se observe dentro de las normas exigidas que requiere cualquier ley de alcance, con el consenso de una auténtica mayoría representativa y no de una compuesta por las minorías a las que además su futuro depende de que a España cuanto peor le vaya mejor para ellos.
La última opción pacífica que contemplo es la de manifestarse ante el Palacio de la Zarzuela para hacer saber a su inquilino que debe actuar de forma inmediata y tajante contra quienes van a destronarlo más pronto que tarde, del confort que le brinda la Corona española. Con la salvedad que él y su familia quedarán bien situados en un exilio dorado, mientras los ciudadanos, igual tenemos que vernos en otra guerra cainita, con la princesa Leonor, queriendo ponerse al frente de quienes han sido abandonados por su padre. ¿Os recuerda esto algún pasaje de nuestra historia? Los españoles hemos sido humillados por nuestros políticos y sólo Felipe VI, con nuestro apoyo, puede evitar que terminemos siendo víctimas de nuestros errores. El Rey tiene un papel destacado en la Constitución Española. ¡Que lo cumpla!
¡Cuidado! con la estrategia del sátrapa Pedro Sánchez Pérez-Castejón. No está «tragando» con todo tan solo para permanecer dos o tres años más en la Moncloa. Su techo es mucho más alto. Sabe que, en unas elecciones libres no tiene nada que hacer y mucho de lo que responder. ¿Conociéndole alguien piensa que se sometería un juicio por alta traición? ¿Acaso este Gobierno ha tomado el control de empresas esenciales como por ejemplo INDRA, para perder el poder? Cita: «España está continuamente reinventándose por el espurio interés de sus políticos. Mucha responsabilidad recae por merced del complejo de los españoles, fáciles de convencer hasta que se les hinchan los dídimos, y entonces… vuelta a empezar» (Luis Torres Píñar). Ahí lo dejo| España apesta a mierda.
Luis Torres Píñar
