Plaza de Cibeles Madrid| Casi 1.000.000 de personas contra «traidor Pedro Sánchez» ante «grave encrucijada»

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FOTOGRAFÍA. MADRID (ESPAÑA), 18/11/2023.- Miles de personas acuden a la manifestación convocada este sábado por un centenar de organizaciones de la sociedad civil contra la amnistía; bajo el lema "No en mi nombre: Ni Amnistía, ni Autodeterminación. Por la libertad , la unidad y la igualdad". La iniciativa invita a los ciudadanos a decir "no a la amnistía". Junto a personalidades de diferentes ámbitos, asisten los líderes del PP, Alberto Núñez Feijóo, y de Vox, Santiago Abascal. En la imagen, cientos de personas abarrotan las inmediaciones de la plaza de Cibeles. Efe

Madrid (España), sábado 18 de noviembre de 2023 (Lasvocesdelpueblo y Agencias).- Decenas de miles de Miles de personas asisten en Madrid a la multitudinaria concentración contra la ley de amnistía ilegal e inconstitucional presentada por el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), que beneficiará a los implicados en el golpe de estado separatista de 2017 en Cataluña a cambio de sus apoyos a la investidura de su secretario general Pedro Sánchez Pérez Castejón, a la que asisten el líder del Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, y el de Vox, Santiago Abascal Conde.

Plaza de Cibeles Madrid| La organización del acto ha trasladado a Lasvocesdelpueblo que la «asistencia roza el 1.000.000 de personas» en la plaza y calles colindantes contra el «traidor Pedro Sánchez Pérez Castejón», secretario general del Partido Socialista ante «grave encrucijada» que atraviesa el Reino de España después de sus acuerdos con la antiEspaña para ser investido presidente de Gobierno del país.

Convocada por organizaciones de la sociedad civil, bajo el lema «No en mi nombre: ni amnistía ni autodeterminación», pasadas las 12.00 horas de este sábado comenzó en la céntrica plaza de Cibeles esta nueva concentración de protesta, que se une a otras convocadas en las últimas semanas.

Entre gritos de «traidor», en referencia al presidente del Gobierno, el autócrata Pedro Sánchez Pérez-Castejón, y rodeados de banderas de España y de la Unión Europea, los manifestantes llenaron la plaza de Cibeles y sus accesos al ritmo de canciones como ‘Mi querida España’, de Cecilia, ‘Libertad sin ira’, del grupo Jarcha; o ‘Mediterráneo’, de Joan Manuel Serrat.

Las banderas de España se podían comprar en la misma plaza por 5 euros la pequeña y 10 la más grande.

La manifestación se produce después de que Sánchez haya sido investido presidente del Gobierno esta semana con los votos de los partidos filoterroristas EH Bildu, separatistas y golpistas, la ultraizquierda ERC y la ultraderecha Junts, que ponían como condición para el apoyo la amnistía ilegal e inconstitucional y celebración de un referéndum de autodeterminación en Cataluña, y cuando la proposición de ley sobre dicho asunto ya fue registrada en el Congreso de los Diputados por el Partido Socialista.

Numerosas asociaciones de la sociedad civil han llamado a los ciudadanos a participar en esta convocatoria ante la «grave encrucijada».

Sostienen los convocantes que el PSOE «ha abandonado su deber de defender el orden constitucional» y que lo hace, además, en «estrecha alianza con los enemigos de la Nación», con los que se dispone a aprobar leyes, como la de la amnistía, «de imposible encaje» en la Constitución «a cambio de mantenerse en el poder».

Esta protesta se une a la que ya convocó el PP el pasado domingo en todas las ciudades de España y que reunió a cientos de miles de personas, las que hay que sumar las concentraciones diarias que se suceden desde hace 15 días ante las sedes socialistas de distintas ciudades de España, destacando las de Madrid, donde la mayoría de las veces acaban con incidentes, tal y como se ha podido desenmascarar Francisco Javier Ortega Smith Molina en una asistencia el viernes, 17 de noviembre de 2023 a Ferraz 70, provocados por la «Policía del Sanchismo«, a quien «el delegado de Gobierno en Madrid» y el Ministerio de Interior, titular del socialista «Fernando Grande-Marlaska Gómez», montando «círculos» para «acorralar» a los manifestantes pacíficos en grupos, cuando estos intentan regresar a sus casas mientras impede a otros vecinos de la zona de salir y acceder hasta sus casas, para luego entonces ir a por ellos a «porrazos» con una violencia extrema y desproporcionada  y poder crear la idea de que «Madrid se está encendiendo».