Lasvocesdelpueblo y Agencias – El «fenómeno VOX» trae a España la democratización de la Izquierda; una izquierda que calla cuando sus aliados maltraten y peguen a la mujer hasta romperlas el tabique nasal; la única izquierda antidemocrática de Europa y apátrida del mundo. ¿Qué esa Izquierda que dice defender al pueblo mientras tenga una vida de lujo y se compra en chalé, cene con la élite corruptos y cacique; llama a la violencia ‘antifascista’ contra: la mujeres, las jóvenes, niños, ancianas, solo por pensar diferente? ¿Qué es esa izquierda que hace mimitos con terroristas asesinos de mujeres y niños? ¿Qué esa izquierda que trasnocha con los enemigos de la patria del Pueblo? ¿Qué es esa izquierda que apoya a los violadores de mujeres en Cataluña por ser españolas? Ante el inicio del fin de su supremacismo moral, el PSOE estalla contra sus adversarios democráticos de Derechas, habla de pacto vergonzante» de la Derecha con los «herederos del franquismo (VOX)» y de una «traición a España, a los españoles y a la «democracia». Eso dice la misma Izquierda que hasta la fecha de hoy, sábado 29 de diciembre de 2018, trasnocha con los terroristas de EH Bildu del asesino terrorista de la masacre de Hipercor (Barcelona) Arnaldo Otegi, los golpistas racistas de ERC, PDECAT-JxCAT y un ‘desequilibrado’ que amenaza con declararle al Pueblo Español una guerra civil desde Cataluña, Quim Torra Pla. ¿Qué es esa izquierda que le miente y engaña al pueblo? Barcelona (España), sábado 29 de diciembre de 2018. Fotografía: SEVILLA (ESPAÑA), 27.12.2018. La diputada almeriense de Ciudadanos Marta Bosquet, que ha sido elegida presidenta de la Cámara autonómica, durante su votación para elegir los miembros de la Mesa, ante la presidenta de la Junta en funciones, Susana Díaz, hoy en el Parlamento de Andalucía en Sevilla que está celebrando la sesión constitutiva de la XI legislatura. Efe.
Según recoge Efe este 27 de diciembre de 2018, el PP dice que su pacto en Andalucía con Cs y Vox será el «prólogo» de lo que acabará ocurriendo en el Gobierno de España y, lo sea o no , lo que es un hecho es que la «alianza de las derechas» pone fin a cuatro décadas de gobiernos socialistas y puede remover el tablero político nacional.
Al aceptar a VOX e institucionalizar su posición en la Mesa del Parlamento andaluz, PP y Cs abren el camino a los pactos con la VOX en otros territorios y lo hacen a cinco meses de unas elecciones municipales, autonómicas y europeas, en las que a nadie va a extrañar ya la irrupción de la formación ‘verde’ española de Santiago Abascal Conde.
Trauma progre
Para el partido socialista andaluz de Susana Díaz no será fácil superar el trauma de perder su poder en Andalucía tras haber ganado los comicios, aunque con el peor resultado de su historia (perdió 14 diputados y se quedó con 33).
Una victoria muy amarga que se lee como un fracaso porque ha facilitado el fin de 36 años de gobiernos socialistas ininterrumpidos en Andalucía y puede trasladar una imagen de debilidad del PSOE cuando el Gobierno de Pedro Sánchez tampoco anda sobrado de estabilidad y no parece que pueda sacar adelante los presupuestos.
El descalabro de Susana Díaz en Andalucía tensa su ya difícil relación con la dirección federal de Pedro Sánchez, que hasta ahora ha dado su respaldo a la presidenta andaluza, pero está por ver que ocurre cuando salga del Gobierno y si vuelven a escucharse las voces que apelaban a una «regeneración» del PSOE andaluz.
De momento, el PSOE estalla contra sus adversarios políticos, habla de pacto vergonzante» de la derecha con los «herederos del franquismo» y de una «traición a España, a los españoles» y a la «democracia».
La despedida
Seguramente palabras muy parecidas a las que se escucharán en mensaje de fin de año que Susana Díaz pronunciará el día 30 todavía como presidenta en funciones, pero que se convertirá en una despedida formal del Gobierno que previsiblemente unos días después pasará a manos del PP y Cs.
Para el PP, la lectura es la contraria, saca pecho de su acuerdo con Cs y Vox, que va a hacer posible el «cambio» en Andalucía.
En palabras de su secretario general, Teodoro García Egea, es el «prólogo» de lo que acabará ocurriendo en el Gobierno de España porque están convencidos de que el PP «liderará los cambios» en otros territorios.
Y paradojas de la vida, en Andalucía ese cambio lo encabezará como presidente de la Junta Juanma Moreno, a quien muchos en la dirección nacional de los populares daban por amortizado tras haber apoyado en las primarias del partido a Soraya Sáenz de Santamaría.
La semilla ‘progre’, el extranjero francés Manuel Valls
A Cs, en cambio, el pacto de PP y VOX puede situarle en una encrucijada y alejarle de la imagen de partido centrista con la que se reivindicaba para escorarle más a la derecha.
El partido de Albert Rivera se esfuerza ya en explicar que su acuerdo programático en Andalucía es sólo con el PP, y que después «se ha sumado VOX».
Si bien tendrá que trabajar para que ese acuerdo no le pase factura en otros territorios, porque muchos les van a recordar que sus socios en Europa no pactan con VOX y que su candidato a la alcaldía de Barcelona, Manuel Valls, se ha pronunciado en contra de cualquier pacto con VOX.
Todo esto mientras la situación política en Cataluña, donde Cs ganó las últimas elecciones, sigue enquistada y no parece que vaya a despejarse en puertas del Juicio del Procés.
La ultraizquierda
A Unidos Podemos (Izquierda Unida y Podemos) en Andalucía (Adelante Andalucía), que aún se lame las heridas por su resultado electoral -perdió tres escaños y se quedó con el cuarto puesto- no le ha quedado otro remedio que asumir un papel de oposición dura a «la derecha y la extrema derecha (VOX)» y ha optado por quedarse fuera de cualquier pacto que implique «blanquear a VOX».
La falta de entendimiento de las izquierdas andaluzas ha bloqueado cualquier acuerdo previo de Podemos con el PSOE de Susana Díaz, y es otro elemento con necesidad de revisión vista la desmotivación de su electorado.
No hay duda sin embargo de que VOX sacará tajada del acuerdo, y de que su entrada en el Parlamento andaluz y ahora en la Mesa de la Cámara puede ser el «trampolín» que muchos temen para su salto a la política nacional.
Los aliados, nerviosos
Las primeras reacciones de los enemigos de España, tras el inicio de la caída de sus compinches en Andalucía, llegaron ayer, viernes desde Cataluña.
El ‘desequilibrado’ racista presidente de la Generalidad Quim Torra se comprometía ayer, viernes 28 de diciembre de 2018, «denunciar a VOX» y el tripartito parlamentario (VOX, PP y Cs) de Andalucía ante Europa.
Torra instaba a su socio presidente de Gobierno, Pedro Sánchez, a «hacerlo» también desde el Estado español.
La respuesta del presidente ‘progre’ se conocía después durante la última rueda de prensa del año 2018 del Consejo de Ministros. El secretario general del PSOE y presidente de Gobierno abría entonces la puerta a una intervención del Estado en Andalucía, con toda la Fuerzas gubernamental para «defender la seguridad y la libertad» de Andalucía, amenazaba un presidente de Gobierno que negocia España y organiza cenas y comidas con sus socios golpistas en Cataluña. Además, gobierno España con los votos de proetarras EH Bildu.
Para el presidente Sánchez, con la llegada de VOX, la unidad de España estaría en juego. Así que Sánchez no descarta la aplicación del Artículo 155 en Cataluña.
El PSOE siempre ha sido antidemocrático; hizo un golpe de estado y provocó una guerra civil en España, los años 30. Para un 155 en Andalucía, los ‘progres’ y aliados necesitarán una mayoría en la cámara Alta del Reino de España.
El 155 no se decreta ni se vota en el Congreso de los Diputados sino en el Senado, aunque quien lo solicite y lo aplique es el Gobierno del Reino y no una formación política. Por eso, la mayoría del PP en el Senado tampoco es suficiente para volver a aplicar de inmediato un 155 en Cataluña, porque quien lo tiene que hacer es el presidente Pedro Sánchez.
